viernes, 4 de diciembre de 2009

Tu me acostumbraste.

TU ME ACOSTUMBRASTE

Tú me acostumbraste
a todas esas cosas,
y tú me enseñaste
que son maravillosas.



Sutil llegaste a mí
como la tentación
llenando de inquietud
mi corazón.



Yo no comprendía
cómo se quería
en tu mundo raro
y por ti aprendí.
Por eso me pregunto
al ver que me olvidaste
por qué no me enseñaste
cómo se vive sin ti.
Yo no comprendía
cómo se quería
en tu mundo raro
y por ti aprendí.
Por eso me pregunto
al ver que me olvidaste
por qué no me enseñaste
cómo se vive sin ti.
Por qué no me enseñaste
cómo se vive sin ti.




No hay comentarios: